El mapa de Mercator crea distorsiones. Igual que el mapa de Peters y cualquier mapa con cualquier proyección sobre el plano. Esta es la historia del mapa correcto, el mapa que no existe.
Cuánto aprende uno a través de los mapas, gracias a esta newsletter. Fascinante viaje. Y mucho sentido común en no dejarnos llevar por los sensacionalismos facilones y tratar de subrayar los matices.
Ya lo comenté en su día haciendo restack, pero no sé por qué, no se quedó aquí el comentario:
Sencillamente, genial.
Lo del “mapa correcto” da mucho que pensar como caso particular del conflicto constante entre las aspiraciones a una verdad objetiva, y especialmente una verdad moral, y las críticas constantes que toda propuesta recibe. Si la conclusión es que no las hay, nuestro empeño por criticar cada variante ¿es porque no se parece a la nuestra o porque verdaderamente hay dimensiones (como en este caso el área, la forma y la distancia) en las que sí cabe objetividad pero que son mutuamente incompatibles? Me vienen a la cabeza los teoremas de incompletitud de Gödel o el principio de incertidumbre de Heisenberg…
Yo considero que el problema surge de buscar una única proyección que valga para todo, cuando existen distintas proyecciones que son perfectamente válidas para cada caso concreto.
Eso sí, la objetividad únicamente existe si únicamente queremos representar ciertas variables, y obviar por completo el resto de información que proporciona un mapa, algo que en la práctica es imposible. Toda información adicional proporciona una perspectiva única y, de algún modo, subjetiva (por aparición o por omisión).
Cuánto aprende uno a través de los mapas, gracias a esta newsletter. Fascinante viaje. Y mucho sentido común en no dejarnos llevar por los sensacionalismos facilones y tratar de subrayar los matices.
Muchas gracias, Francisco!
Qué buenísima entrada! Y, sí, me he guardado el meme.
Gracias, Miguel.
Reconozco que me reí yo solo haciendo el meme en cuestión XD
Maravilloso.
Gracias :)
Ya lo comenté en su día haciendo restack, pero no sé por qué, no se quedó aquí el comentario:
Sencillamente, genial.
Lo del “mapa correcto” da mucho que pensar como caso particular del conflicto constante entre las aspiraciones a una verdad objetiva, y especialmente una verdad moral, y las críticas constantes que toda propuesta recibe. Si la conclusión es que no las hay, nuestro empeño por criticar cada variante ¿es porque no se parece a la nuestra o porque verdaderamente hay dimensiones (como en este caso el área, la forma y la distancia) en las que sí cabe objetividad pero que son mutuamente incompatibles? Me vienen a la cabeza los teoremas de incompletitud de Gödel o el principio de incertidumbre de Heisenberg…
Escribiré sobre ello.
Yo considero que el problema surge de buscar una única proyección que valga para todo, cuando existen distintas proyecciones que son perfectamente válidas para cada caso concreto.
Eso sí, la objetividad únicamente existe si únicamente queremos representar ciertas variables, y obviar por completo el resto de información que proporciona un mapa, algo que en la práctica es imposible. Toda información adicional proporciona una perspectiva única y, de algún modo, subjetiva (por aparición o por omisión).
Estaré atento a ver qué escribes. :)
Magnífico post, como siempre, pero... ¿cual es la escena del Ala Oeste de la Casa Blanca que comentas?
Ahí te va el enlace https://www.youtube.com/watch?v=pC4MwdqYeCI
¡Ah! Se me había olvidado poner el enlace en el texto. Gracias por pasarlo, y ya lo he incorporado.