Muy interesante. Me has recordado la interesantísima historia de la formación del Mediterráneo, en dos cascadas sucesivas que hoy están sepultadas. Parece que después de desecarse, se inundó muy rápidamente. Tuvo que ser espectacular y daría para una buena historia, conectada además con tu entrada sobre la profundidad de los océanos. Ahí va la idea. https://es.wikipedia.org/wiki/Crisis_salina_del_Messiniense
Otra pasada de erudición y búsqueda, muchas gracias. Yo también recuerdo el ruido atronador de la cascada y la empapada por acercarme a hacer la foto (y luego no se veía nada por el agua vaporizada) y la inmensidad del "lago" Eire conduciendo desde Detroit a Toronto. Y el parque de atracciones kitsch con casinos y trenes del horror que es el pueblo entero de Niagara Falls también flipante.
Casualidades de la vida he podido ir 2 veces a Niágara. La primera vez, en 1990, en el lado americano y la segunda, en 2015 en el lado canadiense. Merecen muchísimo más la pena desde el lado canadiense por las vistas.
Jamás se me olvidará la impresión que me causó el ruido de la catarata la primera vez que estuve.
Muy interesante. Me has recordado la interesantísima historia de la formación del Mediterráneo, en dos cascadas sucesivas que hoy están sepultadas. Parece que después de desecarse, se inundó muy rápidamente. Tuvo que ser espectacular y daría para una buena historia, conectada además con tu entrada sobre la profundidad de los océanos. Ahí va la idea. https://es.wikipedia.org/wiki/Crisis_salina_del_Messiniense
Muy interesante, como siempre.
Otra pasada de erudición y búsqueda, muchas gracias. Yo también recuerdo el ruido atronador de la cascada y la empapada por acercarme a hacer la foto (y luego no se veía nada por el agua vaporizada) y la inmensidad del "lago" Eire conduciendo desde Detroit a Toronto. Y el parque de atracciones kitsch con casinos y trenes del horror que es el pueblo entero de Niagara Falls también flipante.
Casualidades de la vida he podido ir 2 veces a Niágara. La primera vez, en 1990, en el lado americano y la segunda, en 2015 en el lado canadiense. Merecen muchísimo más la pena desde el lado canadiense por las vistas.
Jamás se me olvidará la impresión que me causó el ruido de la catarata la primera vez que estuve.