Creo que Javier da en una de las claves, que es el hecho de que la derecha está ganando con facilidad la batalla del relato entre los obreros.
Pero también añadiría el efecto acción-reacción que estamos viendo en toda la Europa que estuvo en el bloque del este. Después de 45 años de influencia comunista forzada, la derecha ha cristalizado como la opción que rompió (y sigue rompiendo) con ese pasado, para muchos, oscuro. Eso se ve con mucha claridad en Polonia, Hungría o Eslovaquia, con unos gobiernos de derecha potentes con gran apoyo popular, pero también se percibe en otros países como este caso de Alemania Oriental.
Y bueno, también habrál algo de lo que hay en todos los países entre los jóvenes. Ser de derecha tradicional reaccionaria es el nuevo "punk". :/.
Te doy mi interpretación: Hay una estrecha conexión entre el electorado más pobre y la extrema derecha. A pesar de su pasado comunista, el este se caracteriza por ser hoy, incluso 35 años después de la reunificación, mucho menos rico que el oeste y especialmente el sur de Alemania. Y el mismo electorado obrero que vota a Trump harto de lo woke, que compra el relato antiinmigración que supuestamente le quita el trabajo y de ver cómo su renta no crece frente a sus ricos vecinos vota AfD.
Creo que Javier da en una de las claves, que es el hecho de que la derecha está ganando con facilidad la batalla del relato entre los obreros.
Pero también añadiría el efecto acción-reacción que estamos viendo en toda la Europa que estuvo en el bloque del este. Después de 45 años de influencia comunista forzada, la derecha ha cristalizado como la opción que rompió (y sigue rompiendo) con ese pasado, para muchos, oscuro. Eso se ve con mucha claridad en Polonia, Hungría o Eslovaquia, con unos gobiernos de derecha potentes con gran apoyo popular, pero también se percibe en otros países como este caso de Alemania Oriental.
Y bueno, también habrál algo de lo que hay en todos los países entre los jóvenes. Ser de derecha tradicional reaccionaria es el nuevo "punk". :/.
Contracultural del mainstream woke.
Te doy mi interpretación: Hay una estrecha conexión entre el electorado más pobre y la extrema derecha. A pesar de su pasado comunista, el este se caracteriza por ser hoy, incluso 35 años después de la reunificación, mucho menos rico que el oeste y especialmente el sur de Alemania. Y el mismo electorado obrero que vota a Trump harto de lo woke, que compra el relato antiinmigración que supuestamente le quita el trabajo y de ver cómo su renta no crece frente a sus ricos vecinos vota AfD.